Cuando uno está en retiro estricto, se desconecta del mundo y de su bullicio mental, emocional… No mira la televisión, no oye la radio, ni bucea por las redes sociales. Todo eso nos sumerge en la neurosis global generalizada, institucionalizada.
Cuando uno está en retiro estricto, se desconecta del mundo y de su bullicio mental, emocional… No mira la televisión, no oye la radio, ni bucea por las redes sociales. Todo eso nos sumerge en la neurosis global generalizada, institucionalizada.